“Queremos que los jóvenes conozcan su potencial para generar impacto positivo”

U4Impact es una plataforma que conecta a empresas y universitarios para realizar proyectos con impacto social y ambiental a través de sus trabajos de fin de grado o máster. Conversamos con Manuel Docavo, emprendedor y fundador de esta empresa social.
<p>Manuel Docavo, emprendedor social y fundador de U4Impact. Foto: U4Impact.</p>

Manuel Docavo, emprendedor social y fundador de U4Impact. Foto: U4Impact.

Cuando los estudiantes se ponen a buscar un tema para su trabajo de fin de grado o fin de máster (TFG/M) normalmente investigan sobre alguna temática que les interesa, pero ¿qué pasaría si, además de interesarles, pudieran implantarlo en la vida real y producir un impacto?

Gracias a U4Impact, esto está cambiando y ya se han generado proyectos transformadores. Las empresas abordan iniciativas que no hubieran podido poner en marcha de otra manera y los estudiantes están encontrando una forma más fácil de acceder al mercado laboral.

No ha sido fácil, y han tenido que darle varias vueltas a la operativa de su propuesta, pero hoy gracias al tesón de Manuel Docavo, su fundador, y a su equipo, se están desarrollando más de 190 proyectos de impacto. Solo tres años después de su creación, más de 150 empresas utilizan esta plataforma, que cuenta con 30 universidades colaboradoras y 2.600 estudiantes registrados.

¿Qué es U4Impact?

U4Impact es una plataforma que conecta empresas y organizaciones con universitarios de toda España para crear proyectos de impacto a través de sus trabajos final de grado o máster.

Impulsamos proyectos que permiten el desarrollo de nuevos conocimientos, competencias y mentalidades necesarios en los jóvenes y en las empresas para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

¿Por qué nace U4Impact? ¿Cómo se os ocurrió la idea?

Hace cinco años desarrollé mi trabajo fin de máster (TFM) con la ONG OAN International, contribuyendo a un proyecto de acceso a agua potable en zonas rurales de Benín, un país de África Subsahariana. Ver el impacto que podía tener un trabajo que podía haberse quedado solo en papel me transformó. He conocido a otros jóvenes que, como yo, a raíz de sus TFG/M descubrían su vocación y la satisfacción de trabajar para los demás.

A raíz de esta experiencia nos dimos cuenta de que, solo en España, se dedican cien millones de horas cada año por parte de los jóvenes universitarios a la realización de proyectos TFG/M, que muchas veces no tienen una aplicación real. Esto nos inspiró a crear U4Impact.


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¿Qué queréis cambiar con U4Impact?

El 85% de los proyectos finales que elaboran los estudiantes no tiene una aplicación real más allá de la universidad. Esto es un desperdicio de talento y de potencial para la sociedad, y una fuente de frustración para miles de jóvenes.

Queremos contribuir a que todas esas horas dedicadas a desarrollar trabajos finales se transformen en una fuente de impacto real en la sociedad y en los estudiantes. Queremos canalizar esos cien millones de horas hacia proyectos que impulsen la innovación social, el desarrollo empresarial sostenible y la empleabilidad de los jóvenes en nuestro país y en otros con problemáticas similares.

¿Cuál es la clave de vuestro éxito? ¿Qué es lo que más valoran los universitarios y las empresas?

Los universitarios valoran muchísimo la posibilidad de dar una utilidad a las horas que tendrán que dedicar a su proyecto final, la posibilidad de tener un impacto positivo con su trabajo y de poder trabajar con organizaciones y empresas de forma que se pueden desarrollar profesionalmente y adentrase en el mercado laboral.

Las empresas valoran, por un lado, la posibilidad de dar vida a proyectos internos de innovación, sostenibilidad, etc., que no son capaces de abordar en el día a día por falta de tiempo, recursos o conocimiento. Por otro lado, valoran mucho la posibilidad que les ofrece el enfoque de nuestra plataforma de atraer y conectar con talento joven altamente demandado y con un alto nivel de compromiso, que después de los proyectos pueden acabar incorporando.

Estamos generando un ecosistema de colaboración win-win entre universidades, estudiantes y empresas u organizaciones. Facilitamos que estas conexiones sean de calidad y efectivas a través de la tecnología, y estamos muy enfocados en que todas las partes reciban valor.

¿Cuál es vuestro mayor reto ahora mismo?

En septiembre cerramos la primera fase de nuestra ronda de inversión y ahora nuestro mayor reto es conseguir completar una segunda fase para contar con los recursos necesarios para acelerar los objetivos del proyecto el próximo año.

Necesitamos seguir incrementando la red de empresas y organizaciones que quieran beneficiarse y apostar por el trabajo con los jóvenes, así como la red de universidades, profesores y otros actores. Necesitamos también poder invertir recursos en tecnología para seguir mejorando nuestra plataforma.

Es un desperdicio de talento y de potencial para la sociedad, y una fuente de frustración para miles de jóvenes. Queremos contribuir a que todas esas horas dedicadas a desarrollar trabajos finales se transformen en una fuente de impacto real.

¿Qué valores de la sociedad estáis tratando de impulsar?

Impulsamos la conciencia, dando a los jóvenes la posibilidad de conocer su potencial para aportar y generar un impacto positivo en el mundo. También el coraje para ponerse manos a la obra y pasar de la teoría a la práctica, del pensamiento a la acción. Todo ello con el compromiso entre estudiantes y organizaciones para lograr juntos objetivos compartidos.

Por último, estamos fomentando la colaboración entre distintos actores sociales -estudiantes, empresas y universidades- para lograr un futuro mejor.

Mayores logros y mayores meteduras de pata…

Meteduras de pata: marcar objetivos al equipo sin darme cuenta si están muy a tope o quemados. Es clave ir viendo que el equipo esté contento y alineado. Hay que trabajar más esto y ahora tenemos un termómetro que permite medir ese tema.

Grandes logros: solemos dar los datos conseguidos en número de alumnos o empresas, pero cuando más nos orgullecemos es cuando conocemos los casos puntuales de chavales que están colaborando con empresas y han podido hacer cosas que de otra manera no hubieran podido y han tenido mucho impacto; y al estudiante, o le contratan o encarrila su futuro gracias a eso.

Otro gran logro ha sido ir evolucionando según los retos que hemos ido teniendo y adaptarnos a ellos. Además de haber montado en tres años una empresa social, levantando una ronda de inversión, y todo con un equipo con mucha unidad y satisfecho.

¿Cómo conseguís la calidad del trabajo de los estudiantes y que estos se involucren en el proyecto?

Hay una parte importante de comunicación en las expectativas que generas. Tiene muchos imputs: la involucración de la empresa, las capacidades técnicas de los estudiantes, su motivación, su capacidad de comunicación… Ser claros con las expectativas de las empresas y estudiar mucho ese proceso para ver donde podemos incluir elementos que hagan que el encaje y producto final sea mejor.

La empresa selecciona a los estudiantes y hay un tema de competitividad entre ellos. También, identificando puntos de dolor en el proceso o dando herramientas a los estudiantes para tener mejor comunicación.

<p>Manuel Docavo rodeado del equipo. Foto: U4Impact. </p>

Manuel Docavo rodeado del equipo. Foto: U4Impact.

¿Cómo va U4Impact a nivel empresarial?

Hasta ahora hemos estado validando el proyecto. Pensamos triplicar este año las ventas del año pasado. Y con la ronda estamos cubiertos por lo menos doce meses.

¿Cuándo considerarías que el proyecto de U4Impact está concluido? ¿Qué indicador mediría el impacto?

Nunca, es un proceso siempre. Un indicador de que vamos en la buena dirección es que los cien millones de horas que se utilizan en proyectos finales tengan un impacto.

Otro indicador, cambiar la mentalidad y que lo normal sea hacer un proyecto que tenga impacto y no hacerlo porque tengo que hacerlo, sino dándole un valor.

¿Qué es para ti un emprendedor social? ¿Se hace o se nace?

Un emprendedor social encuentra un problema y luego aprende sobre modelos de negocio o emprendimiento como forma de solucionar ese problema. Un emprendedor busca un problema con una oportunidad de negocio para sacar una rentabilidad económica.

Un emprendedor tiene éxito cuando tiene rentabilidad, para el emprendedor social es más complicado porque tiene que encontrar un modelo de negocio que solucione su problema social o medioambiental.

Creo que se hace, hay gente que tiene más afinidad, pero todos en la vida pasamos por cosas que nos tocan y lo importante es la capacidad de decir “esto me importa lo suficiente para intentar solucionarlo”.

A los emprendedores que solo dan valor a la parte social les diría que es importante cambiar el chip y generar una empresa que funcione. Pero, también, hay quien empieza muy social y que pierde el foco de porqué empezó. Ese equilibrio, esa tensión y capacidad de adaptación es importante.

¿Qué consejo darías a los emprendedores sociales que empiezan?

Paciencia y disfrutar del proceso. Porque hay mucha ansiedad hasta que encuentras la clave y nunca va a llegar el día en el que digas “he solucionado esto al 100%”, con lo que disfrutar del proceso es muy importante.

A los emprendedores sociales que solo dan valor a la parte social les diría que es importante cambiar el chip y generar una empresa que funcione. También hay gente que empieza muy social, pero al encontrar el modelo de negocio pierde el foco de porqué empezó. Ese equilibrio, esa tensión y capacidad de adaptación es importante.

¿Mayor virtud y mayor defecto?

Si conoces el eneagrama, soy la personalidad nueve. Mi mayor defecto es evitar el conflicto, y así no se pueden conseguir cosas, pero eso también hace que sea muy buen conector entre personas, generando concordia y encontrando puntos comunes.

¿Qué huella quieres dejar en el mundo?

En el funeral de mi abuelo, todo el mundo lo recordaba no por lo que había conseguido, sino porque era una persona que se preocupaba mucho por la gente. A mí me gustaría eso, que a la gente con la que comparto mi tiempo, haya conseguido tocar su vida de alguna forma.

¿Qué mensaje te gustaría mandar a nuestros lectores?

Que apuesten por los jóvenes. El tema de sostenibilidad o impacto tiene muchos retos. Estamos metiendo una o dos dimensiones más en la ecuación (social y medioambiental) y son retos complejos que generan necesidades donde es importante apostar por la gente joven. Que confíen en ellos y les den oportunidades.

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