El acceso a los medicamentos, reclamo unánime de los grupos de interés a las farmacéuticas
Revista Haz ha querido saber cuáles son las prácticas que los grupos de interés recomendarían a los laboratorios y cuáles son las acciones que convendría eliminar, según su opinión.
Con esta intención CE ha preguntado a representantes de los siguientes stakeholders sobre estas cuestiones: ONG, consumidores, sindicatos, organizaciones profesionales…
Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles
Este organismo independiente representa a los farmacéuticos titulares de oficina de farmacia de España. Desde su constitución, FEFE ha destacado por el fomento del diálogo tanto con la sociedad como con sus instituciones, a fin de garantizar la viabilidad y sostenibilidad económica del modelo español de oficina de farmacia y del sistema sanitario español en su conjunto.
– El acceso universal a los medicamentos es un derecho fundamental de todos los ciudadanos que necesita ser salvaguardado y en cuya defensa debe estar comprometida toda la industria farmacéutica.
– El compromiso y transparencia en la investigación son necesarios para seguir avanzando en la búsqueda de nuevos tratamientos contra enfermedades tan prevalentes como el cáncer y en la búsqueda de tratamientos para enfermedades huérfanas. La investigación de nuevos fármacos es básica para que el ciudadano del siglo XXI sea un ser humano con mayor calidad de vida, más sano que sus antecesores.
– Las prácticas responsables de marketing y venta evitan tener que discutir el precio de los fármacos constantemente, son necesarias para desarrollar la indispensable labor que realiza el farmacéutico para la sociedad.
– La industria no debería aceptar la exclusividad de los canales hospitalarios en el acceso a los fármacos, es una restricción que atenta contra el acceso universal a los medicamentos.
– Deberían eliminarse las subastas, porque generan inequidad, atentan contra el principio de igualdad y no ofrecen ventajas ni valor añadido a los laboratorios que las justifiquen. Esta práctica y cualquier otra impulsada por administraciones de forma unilateral y sin coordinación, generando diferencias en las condiciones de acceso a los medicamentos, deberían desaparecer.
Instituto de Innovación y Desarrollo de la RS Sociosanitaria
Inidress es una asociación no lucrativa que agrupa, impulsa y da visibilidad a las acciones socialmente responsables de los agentes del sector sociosanitario.
– Recomendaría todas aquellas prácticas dirigidas a que las acciones de responsabilidad social que están implementando en sus diversas áreas de interés puedan focalizarse en mayor medida hacia el sector sociosanitario en el que efectivamente desarrollan su actividad principal, teniendo al paciente como beneficiario último de todas ellas.
– Inidress es partidario de reforzar y profundizar en aquellas prácticas dirigidas al paciente, en las que el sector está mostrando un notable convencimiento y determinación. La participación de otros agentes, como es el caso de Inidress, en la puesta en marcha de esas medidas puede conseguir que su efecto sea más visible y, en última instancia, socialmente responsable.
CCOO Industria
CCOO de Industria defiende los intereses profesionales, económicos, sociopolíticos y sindicales de los trabajadores del sector industrial, entre los que se encuentran los de la industria farmacéutica.
– Recomendaría la concentración de capacidades investigadoras y productivas. Mayor implicación en proyectos con las universidades y multinacionales del sector con gran capacidad de I+D+i, más inversión en formación y tecnología, la especialización en líneas terapéuticas específicas, etc.
– El esfuerzo investigador de la industria farmacéutica es imprescindible para el avance y desarrollo de nuevas fórmulas curativas, siendo comprensible el objetivo de recuperar la inversión realizada en dicho esfuerzo, el resultado de la investigación debería repercutir en beneficio común de la sociedad y por ello ser transmitido y compartido de forma fiel y transparente a la comunidad científica.
– Los medicamentos se desarrollan con un objetivo principal: curar enfermedades. Por ello, el compromiso y responsabilidad en la transmisión de la información hacia los profesionales de su utilización o consumo debe ser una las prácticas con mayor nivel de exigencia de la industria farmacéutica.
– La industria debería eliminar la publicidad en medios de comunicación audiovisual. Por este medio la información llega a cualquier ciudadano con capacidades y niveles de comprensión de la información diferentes, incluidos niños y ancianos, que en ocasiones no asimilan correctamente y puede inducir a tomas y prácticas de riesgo para su salud.
La información sobre medicamentos debe ser realizada por profesionales formados y expertos, con la única finalidad de afrontar el tratamiento de una enfermedad o síntomas previamente diagnosticados por profesionales y/o especialistas.
Organización de Consumidores y Usuarios
La OCU es una organización sin ánimo de lucro que defiende los intereses de los consumidores y les ayuda a hacer valer sus derechos. Cuenta con, entre otros servicios en materia de salud, un espacio llamado Adversia para emitir quejas sobre medicamentos.
Desde OCU entendemos que debe existir un equilibrio saludable entre los intereses comerciales legítimos de las compañías farmacéuticas y los intereses de salud pública y que no necesariamente siempre coinciden. En este sentido apuntamos una serie de medidas que podrían mejorar la percepción de la industria farmacéutica que tienen los consumidores:
– Transparencia en la información sobre los costes reales de la investigación. Como punto de partida se tienen las cifras de investigación y desarrollo de moléculas de la iniciativa independiente DNDi (Medicamentos para enfermedades olvidadas) que las cifran entre 100 y 150 millones de euros. En cambio, la industria farmacéutica habla de más de 2.500 millones de dólares.
– Declarar las relaciones de intereses con todos los actores del sector de la salud y la sanidad.
– Ofrecer información clara sobre los gastos de marketing y publicidad, incluido el encargo de elaboración de artículos ghostwriting y publirreportajes sobre determinados tratamientos.
– Búsqueda de vías alternativas a las patentes como modelo de negocio para favorecer la innovación en medicamentos que la población realmente necesita. Búsqueda y propuestas de retornos de inversión razonables que no pongan en riesgo la sostenibilidad de los sistemas públicos de salud.
– Introducir transparencia en los resultados de todos los ensayos clínicos y que esta información sea accesible.
– En opinión de la OCU convendría eliminar las prácticas que retrasan la llegada de los genéricos al mercado, normalmente fruto de acuerdos entre compañías farmacéuticas; esto perjudica a los consumidores, limitando su acceso a medicamentos más económicos.
Salud por Derecho
Se trata de una organización de defensa de los derechos humanos centrada, en concreto, en el derecho a la salud. Su fin institucional es promover y contribuir a que todas las personas de los países empobrecidos puedan ejercer de forma real y completa este derecho universal.
Tal y como la patronal farmacéutica expresa en público, parece que el sector está preocupado por «triangular innovación, acceso y sostenibilidad»; sin embargo, será tarea imposible a menos que se introduzca en la ecuación modelos alternativos a los actuales para reconducir la innovación de medicamentos a las áreas de mayor relevancia para la salud pública y desarrollar tecnologías sanitarias asequibles.
Es necesario una transformación sistémica y sería deseable que Industria participara de esta visión para sumarse a la misma. No obstante, la mayoría de esos cambios tienen que ser propiciados por los gobiernos. Algunas de las medidas que tanto la Fundación Salud por Derecho como la campaña No es sano, de la que Salud por Derecho es impulsora y coordinadora, serían:
– Introducir transparencia en el sistema y garantizar un debate público informado. La sociedad tiene derecho a conocer:
• Los precios reales de transacción en la compra de medicamentos por parte del sistema público de salud.
• El detalle sobre las inversiones públicas e incentivos fiscales en I+D para conocer la trazabilidad de aquellos proyectos que resulten en tecnologías sanitarias comercializadas.
• El detalle sobre todos los datos clínicos, así como los resultados y estructura de costes de los productos farmacéuticos financiados total o parcialmente con dinero público.
• El detalle sobre el proceso de elaboración de las normas y leyes que afecten a este sector, incluyendo la exposición del personal de la Administración y del órgano legislativo a diferentes actores que intervienen en él y la declaración de conflictos de interés por parte de los participantes en la toma de decisiones.
• La evaluación de tecnologías sanitarias para garantizar que solo se financien con dinero público aquellos medicamentos que tengan una ventaja terapéutica añadida.
– Incorporar criterios de interés público para toda inversión realizada por el Estado. Estos criterios afectan al precio final de los productos, el acceso de pacientes a ellos e, incluso, la propiedad misma de la innovación.
– Promover iniciativas de I+D basadas en nuevos modelos de innovación que no dependan exclusivamente de las patentes como incentivo a la investigación y modelo de negocio.
– Convendría cambiar la actual estructura de costes «tipo» del sector; la «financiarización» del sector farmacéutico; las actuales estrategias de pricing y comercilización, y la opacidad en cuanto a los costes reales de I+D.
Consejo General Colegios Oficiales de Farmacéuticos
El Consejo General es el órgano de representación, coordinación y ejecutivo superior de los Colegios Oficiales de Farmacéuticos de España. Responde a este cuestionario Eugeni Sedano, vocal nacional de Farmacéuticos en la Industria del Consejo General del CGCOF.
– Convendría analizar las políticas sanitarias y los planes de salud con el fin de coordinar las actividades de la industria con las políticas asistenciales, que permitan dirigir los esfuerzos hacia los problemas de salud detectados y priorizados según los distintos niveles de atención sanitaria (atención primaria, especializada y sociosanitaria). La actuación debería facilitar el trabajo conjunto con la red asistencial farmacéutica: farmacia comunitaria, de atención primaria y hospitalaria.
– En relación a la I+D, se debe mantener y ampliar la colaboración con hospitales, universidades y centros de investigación, así como con otros sectores tecnológicos. Esta colaboración público-privada permitirá diseñar y desarrollar productos y servicios que mejoren los resultados de salud de la población.
– ¿Qué práctica convendría eliminar en el sector farmacéutico? Aquella que se tome exclusivamente en función de criterios económicos, sin que se busque un beneficio concreto para el paciente.
Federación Española de Enfermedades Raras
Representan a las personas con enfermedades poco frecuentes y sus familias, con el objetivo de defender, proteger y promover los derechos de los más de tres millones de personas con ER en España.
– En el caso de las Enfermedades Raras (ER) no solo valen los criterios economicistas, que deberían dejarse a un lado cuando hablamos de la calidad de vida de los pacientes.
Cuando hablamos de investigación y desarrollo en el campo sanitario, muchas veces nos ceñimos a la rentabilidad como única bandera para desarrollar o no una investigación, pero no podemos olvidarnos del valor ético de los medicamentos huérfanos, ya que su desarrollo es vital, literalmente, para las personas con enfermedades poco frecuentes. Desde FEDER, insistimos en que el coste de un medicamento debe compararse con el beneficio que implica para un paciente disfrutar de, tan solo un año, con una buena calidad de vida.
– Teniendo en cuenta que la consolidación de los modelos de investigación depende, en muchas ocasiones, de las grandes compañías y los gobiernos, es imprescindible contar con la coordinación entre pacientes, expertos y administración para poder consolidar estos modelos.
– También es necesario poner en valor la innovación en el caso de las enfermedades de baja prevalencia, ya que nos permite promover la información ante el conocimiento, así como un desarrollo sostenible del valor de los medicamentos para contribuir a un acceso equitativo a los mismos. Poner en valor la innovación es poner en valor la vida, algo que muchas veces se deja de lado ante los problemas de financiación.
Prioridades de los grupos de interés: análisis
Los grupos de interés del sector farmacéutico envían un mensaje claro a la industria: el Acceso a los medicamentos debe ser su principal prioridad en las políticas de responsabilidad social.
No existe diferencia respecto al sector al que representan (empleados, consumidores, pacientes, sanitarios, farmacéuticos…), todos coinciden en señalar la garantía del acceso a los medicamentos como la cuestión esencial del sector farmacéutico, citando esta área como la primera necesidad.
«El acceso universal a los medicamentos es un derecho fundamental de todos los ciudadanos que necesita ser salvaguardado y en cuya defensa debe estar comprometida toda la industria farmacéutica», explican desde FEFE; la organización de consumidores recuerda que los medicamentos deben ser también asequibles para la población, «el precio de los medicamentos es esencial: hoy día los precios se fijan en función de lo que el Estado puede pagar en negociaciones opacas, y esto no debe continuar así porque los precios altos impiden o dificultan el acceso a la salud».
«La innovación sin acceso carece de sentido», continúan desde Salud por Derecho, y los representantes de las personas con enfermedades raras no podían elegir otra prioridad: «Es imprescindible poder garantizar el acceso a estos tratamientos mediante un acceso ágil y equitativo a medicamentos de uso vital para las personas con enfermedades raras en el Sistema Nacional de Salud».
En la misma línea, los stakeholders consultados por esta revista apuestan por el Compromiso y la transparencia en la investigación como otro de los temas prioritarios a tener en cuenta por la industria.
La OCU pone énfasis en la relevancia que tiene transparentar todos los resultados de los ensayos clínicos, «los positivos y también los negativos, consideramos que esta información es vital para hacer avanzar la ciencia y hacerla útil para pacientes y profesionales», pero también en que la industria sea transparente en los «costes reales de la investigación» y «en el importe de la aportación pública en la investigación del medicamento cuando esta exista».
La tercera cuestión en la que coinciden casi todos los grupos consultados se refiere a las Prácticas responsables de ventas. «Las prácticas responsables de marketing y venta evitan tener que discutir el precio de los fármacos constantemente, son necesarias para desarrollar la indispensable labor que realiza el farmacéutico para la sociedad», explican desde la Federación de Farmacéuticos, que han situado esta cuestión en la tercera posición de la lista.
«La información de la industria debe estar dirigida a profesionales, debe ser transparente y completa, haciendo hincapié en las medidas de monitorización del medicamento, principalmente cuando este sea un medicamento nuevo, y alentando a la comunicación activa de cualquier evento adverso. Siempre se debe poner en primer lugar la seguridad del paciente», concluyen desde la Organización de Consumidores y Usuarios.
Avanzando en la tabla de prioridades, los grupos de interés señalan el Cumplimiento de políticas y códigos, la Transparencia de pagos médicos y el Pago de impuestos como temas relevantes a tener en cuenta por las políticas de RSC de las farmacéuticas.
Desde el Instituto para la Responsabilidad Sociosanitaria destacan la relevancia del «cumplimiento de políticas y códigos, y por encima de todo, del pago de impuestos», que señalan como la cuestión más relevante para ellos.
Por su parte, el Colegio General de COF recuerda que hay que «garantizar que se cumple íntegramente con la normativa y con los compromisos asumidos por la industria farmacéutica en su Sistema de Autorregulación, mediante políticas de transparencia y comunicación en las relaciones con entidades sanitarias, profesionales y pacientes».
Sin duda, los grupos de interés valorarán positivamente el esfuerzo de las empresas adheridas a Farmaindustria de transparentar las Transferencias de valor, pues sitúan esta cuestión en la primera mitad de la tabla de prioridades.
Tanto el Impacto medioambiental, por lo desarrollado y controlado que se encuentra el sector a nivel de la protección al medio ambiente, como las cuestiones referentes a los recursos humanos (Equidad y transparencia salarial y Diversidad) de las farmacéuticas generan menor interés a los grupos consultados.
Finalmente, los grupos de interés sitúan en última posición el Gobierno corporativo, quizás el tema que menos impacto directo tiene sobre la cuestión en la que creen que la industria farmacéutica debe depositar todos sus esfuerzos: el acceso a los medicamentos.