América en el negocio español

HAZ27 diciembre 2005

Esta realidad ha sido posible gracias a las actividades desarrolladas por las empresas españolas en América Latina a partir de la década de 1990.

Mientras que la inversión en Europa fue realizada por empresas pequeñas y medianas, la inversión en Latinoamérica la llevaron a cabo, casi de forma exclusiva, grandes empresas españolas pertenecientes a los sectores de la telefonía, electricidad, sistema financiero, aguas, infraestructuras o energía.

Independientemente de las diferentes formas de actuación de las compañías, la mayoría de ellas tienen algo en común: el éxito económico alcanzado y, sobre todo, el haber logrado alzarse a la categoría de «multinacionales».

Hoy en día, algunas de las compañías españolas clave tienen un mayor peso específico que algunas de las empresas que en su día simbolizaron el ideal de capitalismo globalizado. Así, Telefonica y Grupo Santander tienen hoy más valor bursátil que Siemens, America Express o Walt Disney, mientras que BBVA vale más que Deutsche Telecom o Merryl Lynch o Macdonald, y Repsol es más valorada que Starbucks o Halliburton.

Dentro de la inversión española en Latinoamérica, hay tres mercados que destacan: financiero, energético y de comunicaciones. Entre estos sectores, las empresas que más importancia han adquirido en dicho continente son Grupo Santander, BBVA, Endesa, Repsol YPF y Telefónica. Veámos hasta que punto.

SECTOR FINANCIERO. El sector de la banca destaca en España por su confianza en la inversión latinoamericana, lo que le ha beneficiado mucho, pero también conlleva ventajas para el conjunto de la economía española. Por un lado, esta expansión puede servir a la internacionalización de las pymes españolas; además, hace más accesibles ciertos productos y mercados a sus clientes; y, asimismo, la política española puede verse fortalecida por la inevitable interacción entre economía y relaciones diplomáticas.

  • Santander

Por un lado, Grupo Santander comenzó su estrategia de expansión internacional en la década de 1950, con la inauguración de sus oficinas de representación en La Habana y México. Pocos años después, en 1963, fundó su primera delegación en el extranjero; concretamente en Argentina, con lo que empezó su gran apuesta por la inversión en este continente.

Desde entonces, la apertura de sucursales ha sido imparable y América Latina ha pasado a ser una de sus mayores fuentes de ingresos con 22 millones de clientes.

Hoy en día, cuenta con 4.000 oficinas a través de las que gestiona 130.000 millones de dólares Después de realizar importantes adquisiciones de bancos en Brasil y México durante la década de 1990, compró el 93% del Banco Caracas situándose, de este modo, como el primer grupo financiero de Venezuela.

Pero, además de esta parte de la estrategia comercial, el Santander se ha propuesto dar un impulso al negocio de la gestión de activos en América Latina. Las pocas posibilidades de inversión en España y Europa, debido a la gran competencia y la falta de oportunidades de crecimiento de estos mercados, le han llevado a concentrar sus esfuerzos en este continente.

De este modo, actualmente es la primera entidad bancaria de la región, con un posicionamiento fuerte en varios países de la zona: México, Perú, Brasil, Bolivia, Chile, Argentina, Colombia, Panamá, Puerto Rico, Venezuela, Paraguay y Uruguay.

La estrategia del grupo se engloba en el denominado Proyecto América, lanzado en 1999, que persigue tres objetivos concretos: en primer lugar, alcanzar tasas de rentabilidad del 25%; lograr una eficiencia con unos ratios menores al 50%; y, por último, aumentar un 10% la cuota de mercado.

Estos objetivos están saliendo adelante, sobre todo, gracias a la contribución de Brasil. Dicho país supone la mayor aportación del conjunto del continente al Grupo Santander, con un 38% del beneficio total.

  • BBVA

Por su parte, el BBVA ejerce actividades económicas en catorce países de América Latina; Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, El Salvador, México, Panamá, Paraguay, Perú, Puerto Rico, Uruguay y Venezuela; y la inversión global del Grupo asciende a unos 9.500 millones de dólares.

Este banco inició sus negocios en América Latina en 1995, ayudado por los procesos de privatización y desregulación en los que se vieron sumergidas muchas economías de la zona en esas fechas. Hoy en día, BBVA cuenta con más de 23 millones de clientes en América Latina y tiene 4.738 oficinas por diferentes países.

En estos 10 años, el BBVA ha conseguido colocarse en una posición muy cómoda, siendo el segundo banco más importante de Latinoamérica.

Los negocios del BBVA no se han centrado exclusivamente en las actividades financieras tradicionales. Ha realizado una clara apuesta por la gestión de pensiones y ha logrado consolidarse como líder en el negocio, con una cuota de mercado cercana al 30%, muy por encima de sus competidores.

Tanto el crecimiento de los clientes como el significativo incremento de los beneficios han sido rasgos distintivos para el BBVA en América Latina durante el nuevo milenio, con la excepción de Argentina, debido a la crisis económica y política que ha azotado el país.

Principales países en los que BBVA realiza actividades económicas:

Argentina: BBVA continuó su apuesta en este país realizando un fuerte saneamiento que alcanza los 1.889 millones de euros con el fin de cubrir toda la inversión que realizó al comprar el 68% de las acciones del Banco Francés, segunda entidad bancaria más importante del país.

Brasil: En 1998 el BBV adquirió el control del Banco Excel Económico, fruto de esta fusión nació BBV Brasil que ha sufrido un gran incremento de volumen de negocio gracias a las acertadas políticas de captación de clientes y el aumento significativo de su número de oficinas.

México: Por otra parte, el BBVA se encuentra en México representado a través de BBVA Bancomer. Este país representa un mercado expansivo y rentable, que le proporciona una gran parte de los beneficios de la región.

BBVA Bancomer, que es la segunda entidad bancaria más importante de México, cuenta con más de nueve millones de clientes y es líder en el sector de seguros provisionales y pensiones.

SECTOR ENERGÉTICO. Salvo en el caso de Brasil, los grupos extranjeros son los principales operadores del sector eléctrico en Latinoamérica. La inversión no se centra en los grandes grupos internacionales, sino, más bien, en medianas empresas que vieron posibilidades de expansión en dicho continente.

  • Endesa

Éste es el caso de la Empresa Nacional de Electricidad, S.A. (Endesa) que, con su proceso de privatización entre 1988 y 1999, inició una estrategia para expandirse, consistente en la adquisición de activos domésticos.

Sin embargo, ante la gran competencia en España sobre el suministro eléctrico, Endesa decidió internacionalizarse, realizando las primeras inversiones en Argentina, Portugal y Perú. Al cabo de unos años era un operador clave en doce países, de los que seis eran latinoamericanos.

Latinoamérica, por tanto, se ha convertido en un eje clave de la economía de esta empresa española. Comenzó a invertir en este continente en 1992, con el objetivo de ser un suministrador de energía en todos los países del Mercosur y, especialmente, en Brasil, por su gran atractivo económico.

La expansión fue muy rápida: Endesa ha conseguido ser el primer operador privado del sector eléctrico en América Latina y el Caribe; además de ser líder en Chile, Argentina, Colombia, Perú y uno de los más importantes de Brasil. Asimismo, ha promovido, con bastante éxito, la integración en el sector eléctrico (generación, transporte y distribución).

En 2002, con la devaluación de las monedas de Brasil y Argentina y la crisis que afectó a este último país, Endesa vio cómo peligraban sus filiales latinoamericanas debido a los problemas de liquidez. Por ello realizó provisiones extraordinarias y a saneó activos en este continente.

En octubre de 2002 se firmó el Plan de Fortalecimiento Financiero, que le permitió hacer frente a parte de las deudas acumuladas en la crisis y promovió la independencia financiera de las filiales latinoamericanas ante posibles dificultades en el futuro.

  • Repsol YPF

Asimismo, cabe destacar el caso de Respsol YPF. Esta empresa se creó en 1986, remplazando al Instituto Nacional de Hidrocarburos.

Tres años después empezó su privatización, que terminó en 1997, y permitió que se convirtiera en uno de los principales operadores internacionales del sector de hidrocarburos; sobre todo después de la fusión con la petrolera argentina YPF. Actualmente, Repsol YPF tiene negocios en 29 países y se encuentra en el puesto 91 en la lista de las multinacionales más importantes del mundo.

A mediados de los años noventa, Repsol comenzó su expansión internacional, dando especial importancia a sus actividades económicas en América Latina y el Caribe.

Hoy en día, está presente en Bolivia, Argentina, Perú, Venezuela, Colombia, México, Trinidad y Tobago, Chile, Cuba, Ecuador y Brasil. La estrategia de incursión en estos mercados varía dependiendo del país, pero se puede encontrar algún rasgo en común que consiste, en gran medida, en la adquisición de las empresas dominantes del sector.

Repsol YPF es, actualmente, la primera compañía privada de Latinoamérica en producción de petróleo y gas.

Haciendo un análisis de las actividades Latinoamericanas de Repsol YPF país por país, queda claro que la estrategia de la compañía en América Latina consiste básicamente en centrarse casi de forma exclusiva en Argentina, país donde el valor de sus activos totales casi puede equipararse a los de la compañía en España.

Precisamente en este país, Repsol YPF tiene una sólida posición de liderazgo en las reservas de gas natural. Aunque durante la crisis argentina fue la empresa española más perjudicada, la compañía planteó una estrategia de permanencia en Latinoamérica con la que logró mantenerse en posiciones de liderazgo en su sector.

COMUNICACIONES.

  • Telefónica

La importancia de esta compañía radica en que es una de las más importantes en el sector de la comunicación, aún más por ser líder de telefonía fija en Latinoamérica. Pero, además de dedicar más de 22.000 millones de euros a la adquisición de empresas y mercados de esta región –sobre todo en Brasil-, ha impulsado la calidad y el acceso a la comunicación invirtiendo en infraestructuras y líneas telefónicas. De hecho, ha conseguido que se dupliquen las líneas en Brasil, Argentina y Perú.

Telefónica también está presente en el mercado latinoamericano con la telefonía móvil, Internet, callcenter, etc. Su presencia está concentrada en Brasil, Perú, Argentina, Chile, Puerto Rico, Venezuela y México.

No obstante, el 50% de la inversión encuentra en Brasil, país en el que ocupa el primer puesto como operador de telefonía móvil y fija, y el segundo en el acceso a Internet.

El desarrollo económico que han vivido estas empresas no sólo les otorga importantes beneficios sino que redimensiona su papel en las sociedades latinoamericanas. En un momento en el que nos cuestionamos cuál debe ser la función de las empresas en la sociedad no podemos perder de vista que algunas de nuestras empresas juegan un papel muy importante en otros países.

Por Sandra Otaegui y María Cabrera

El compromiso de BBVA en América Latina

La principal obligación y responsabilidad de una empresa es generar riqueza desde la satisfacción de las necesidades de sus clientes, del desarrollo profesional de sus empleados y desde la generación de valor para sus accionistas. La generación de riqueza así entendida es la aportación social más importante que una empresa puede hacer a la sociedad.

ÉSTA ES LA VISIÓN QUE TENEMOS EN BBVA de la responsabilidad social corporativa (RSC). Visión que extendemos de manera homogénea a todos aquellos países en los que estamos presentes y que, por supuesto, se aplica también a América Latina, una región a la que nos sentimos estrechamente vinculados.

AMÉRICA LATINA ES MUY IMPORTANTE PARA NOSOTROS en términos de aportación a los resultados del Grupo. Pero todavía más importante que esto creo que es reconocer la contribución que América Latina ha tenido en el crecimiento y desarrollo del Grupo en los últimos años y en la configuración de su actual Cultura Corporativa. Si BBVA es hoy una de las principales entidades financieras de referencia en el mundo es, en gran parte, gracias a su presencia en esta región.

AL MISMO TIEMPO, BBVA, con su inversión en América Latina, ha favorecido el desarrollo y la estabilidad de los sistemas financieros locales, dotándolos de una mayor profesionalización e institucionalización, lo cual ha contribuido significativamente al progreso de la sociedad latinoamericana.

EL GRUPO BBVA CUENTA CON UN DEFINIDO MODELO DE NEGOCIO en esta región, dentro del cual se enmarcan diferentes y numerosos ámbitos de actuación en el terreno de la RSC, entre los que me gustaría destacar los siguientes: las relaciones laborales, campo en el que el modelo de BBVA garantiza el carácter corporativo de todas las políticas del Grupo; el medio ambiente, con la adopción de los Principios de Ecuador y el desarrollo de productos ambientales; la atención a segmentos menos atendidos, a través del desarrollo de soluciones financieras adaptadas a sus necesidades; y, una intensa acción social, a través de múltiples políticas de patrocinio y mecenazgo (tanto de los bancos y empresas del Grupo como de nuestras cuatro fundaciones latinoamericanas) y del impulso de programas de voluntariado.

Por José Ignacio Goirigolzarri