'Familia Necesita Familia': un hogar para los refugiados ucranianos

Desde que Rusia lanzara la ofensiva militar contra Ucrania, el pasado 24 de febrero, más de 4,8 millones de ucranianos han huido de su país, dando lugar a la crisis de refugiados que más rápido ha crecido desde la II Guerra Mundial, según los últimos datos de Acnur. Por su parte, más de siete millones de personas han sido desplazadas internamente en Ucrania. En resumen, casi doce millones de seres humanos -una cuarta parte de la población del país- han tenido que dejar atrás sus hogares, sus vidas y, en muchos casos, a sus familias.

A diferencia de otras crisis humanitarias, la respuesta de los vecinos europeos está siendo de máxima solidaridad y acogida. Los países fronterizos con Ucrania son los que están recibiendo un mayor número de desplazados. Especialmente Polonia, que a mediados de abril había abierto las puertas ya a más de 2,7 millones de ucranianos. Le sigue Rumanía, con más de 730.000 refugiados; Hungría, con 454.000 y Moldavia, que pese a su escasa población ha recibido a más de 420.000 desplazados ucranianos.

A España, según las estimaciones del ministro de Inclusión, han llegado ya unos 80.000 refugiados ucranianos, si se cuentan todos los permisos de protección o citas ya agendadas para tenerlos. Dada la Ley marcial impuesta en Ucrania ante la invasión, que impide a los hombres de entre 18 y 60 años abandonar el país durante la guerra, el flujo de refugiados ucranianos que está llegando a nuestro país está compuesto, en su mayoría, por mujeres -suponen el 67% del total- y menores -más de un tercio de todos los refugiados-, como recoge Newtral basándose en los datos del Ministerio de Inclusión.

España, junto al resto de Estados miembros de la Unión Europea, ha desplegado una serie de medidas y herramientas para ayudar a los desplazados. Así, los ucranianos que huyen del conflicto en su país no necesitan visado para entrar en el espacio Schengen y pueden instalarse donde prefieran, según sus redes familiares o personales.

Una vez llegan a España, tanto los desplazados a causa de la invasión rusa como los ucranianos que se encontraban en España cuando estalló el conflicto que carezcan de recursos para mantenerse, pueden solicitar su entrada en el Sistema de Acogida de Solicitantes de Protección. La Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) y Accem o Cruz Roja son las organizaciones a las que pueden acudir, según la zona de España en la que se encuentren.

El Sistema de Acogida cuenta con dos fases: una primera acogida de emergencia en la que se cubren las necesidades básicas y se ayuda a las personas beneficiarias a adquirir las habilidades necesarias para el desarrollo de una vida independiente; y una segunda fase, en la que siguen recibiendo apoyo mediante ayudas económicas al alquiler y atención a necesidades básicas.

Fundación la ”Caixa” conecta a familias

Además del despliegue de CEAR y otras ONG de ayuda al refugiado para la primera fase de acogida, la Fundación ”la Caixa”, a propuesta del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, ha puesto en marcha el programa Familia Necesita Familia. Un servicio para conectar a familias españolas que desean acoger a refugiados con las familias ucranianas que han llegado a nuestro país huyendo de la guerra, ofreciéndoles de esta forma el mejor entorno y acompañamiento posibles hasta que normalicen su situación.

En concreto, la Fundación ”la Caixa” se ha sumado al circuito desplegado por el Ministerio de Inclusión -organismo responsable del Sistema Nacional de Acogida- en la fase posterior a la primera acogida de emergencia que reciben las personas refugiadas a su llegada a España. Una primera acogida que suele ser de corta duración, en hostales, albergues u hoteles, y que permite hacer una valoración del estado de la familia y el diagnóstico de sus necesidades.

Tras esta primera ayuda, la Fundación ha implementado un proyecto para recibir, coordinar y gestionar las solicitudes de acogimiento de las familias españolas. El papel de la Fundación ”la Caixa” es el de valorar a las familias que se postulan para acoger a una familia ucraniana, teniendo en cuenta el número de personas a las que pueden alojar, las características del domicilio y el plazo temporal al que pueden comprometerse a mantener la acogida, entre otros aspectos. Una vez que las solicitudes son validadas por la Fundación, se derivan al Ministerio de Inclusión, conectándose así con las demandas de acogida por parte de los refugiados.

“El Ministerio ha confiado en nosotros para colaborar en una de las labores más necesarias ante la crisis humanitaria en Ucrania: la acogida de las personas afectadas por el conflicto bélico”, explicó el presidente de la Fundación ”la Caixa”, Isidro Fainé, durante la presentación del programa, a finales de marzo. “Con este proyecto, por el que la Fundación apuesta decididamente, queremos contribuir a que los refugiados encuentren el mejor hogar posible en España, canalizando a la vez la solidaridad de los ciudadanos”.

Un hogar de verdad para los refugiados ucranianos

La comunicación del programa Familia Necesita Familia es el punto de arranque de la acogida familiar que impulsa la Fundación ”la Caixa”, tal como explica a esta revista la coordinadora del proyecto, Sandra Blanch. “Llegamos a las familias a través de dos ejes principales: un teléfono o call center a disposición de las familias interesadas en ser acogedoras, para hacerles un pequeño cribaje, y un formulario en la página web del programa”.

Así, todas aquellas familias que residan en las cuatro provincias en las que se está desarrollando el programa -Barcelona, Madrid, Málaga y Murcia- y deseen convertirse en hogar de acogida de refugiados ucranianos, pueden llamar al teléfono gratuito 900 670 909 o inscribirse en la web del programa.

Una vez registradas las peticiones, las Oficinas Técnicas de Acogida de la Fundación ”la Caixa” son las que reciben la información de estas familias e inician el proceso de validación, atención y seguimiento hasta que se les considera aptas. Existen 18 Oficinas Técnicas -seis en Madrid, seis en Barcelona, tres en Málaga y tres en Murcia-, alojadas en entidades sociales vinculadas a la actividad y los programas de la Fundación.

Se trata de organizaciones como Save the Children, Salesians Sant Jordi, Fundació Pere Tarrés, Cepaim o Asociación Pinardi que, como recuerda Blanch, cuentan con experiencia previa con la Fundación y son de la “máxima confianza”. En concreto, estas entidades y sus especialistas en intervención familiar forman parte del programa CaixaProinfancia, que cada año presta apoyo a más de 60.000 niños de toda España y a sus familias.

De esta forma, las Oficinas Técnicas mantienen una primera sesión informativa -online o presencial- en la que, como explica la coordinadora del proyecto, “se les detalla bien en qué consiste la acogida y los compromisos que supone hacerse familia acogedora”. Tras esta reunión, se lleva a cabo una entrevista personal a la familia, para conocer a cada uno de sus miembros, entorno, vivienda, condiciones, etc. El siguiente paso es la visita al domicilio de acogida para verificar toda la información obtenida previamente.

Y, finalmente, con toda esa información, se da una respuesta. Si es favorable, se traslada al Ministerio de Inclusión, que será el encargado de hacer el match entre la familia española de acogida y la familia ucraniana refugiada. En cuanto el Ministerio asigna una familia, un técnico de la Oficina Técnica de Acogida contacta con la familia acogedora para comunicárselo y organizar el primer encuentro con la familia ucraniana.

Una vez que se lleva a cabo la acogida, las Oficinas Técnicas son también las encargadas de hacer el seguimiento. “Cada semana, durante los dos primeros meses, se hace una llamada al hogar de acogida para preguntarles por la convivencia o las dificultades que puedan producirse”, explica Blanch. A su vez, la Oficina Técnica correspondiente mantiene el contacto y comunicación con el Ministerio de Inclusión.

La coordinadora de Familia Necesita Familia recuerda también que el programa es “totalmente voluntario, la familia acogedora no recibe ninguna compensación” y que el compromiso inicial es de un mínimo de seis meses. “Si la acogida funciona bien y es necesario, se puede prorrogar medio año más”. En el caso de que hubiese algún problema de convivencia, se valoraría la situación con los técnicos de acción social de la Oficina Técnica de Acogida.

Hasta ahora, la Fundación ”la Caixa” cuenta con más de 2.000 familias españolas registradas en el programa, la mayoría de ellas de Madrid. El proyecto, está dando sus primeros pasos, prevé contar con una inversión de 2,5 millones de euros para su puesta en marcha y desarrollo durante el próximo año.

Fundación ”la Caixa”, junto a Acnur y Cruz Roja

El proyecto Familia Necesita Familia se suma a las distintas iniciativas que está impulsando la Fundación ”la Caixa” para apoyar a las personas afectadas por el conflicto de Ucrania desde diferentes ámbitos.

Es el caso de la aportación de un millón de euros al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), destinados íntegramente a atender a las personas refugiadas que se han visto obligadas a abandonar sus hogares a causa del conflicto en Ucrania. El objetivo es contribuir a cubrir las necesidades más básicas de los desplazados en países fronterizos como Polonia y Moldavia, a través de productos de primera necesidad como los destinados al refugio, comida, medicamentos y saneamiento e higiene, entre otros.

Por otra parte, la Fundación ”la Caixa” ha contribuido con un total de 1,5 millones de euros a la labor desplegada por Cruz Roja, con el objetivo de atender tanto a los desplazados internos como a las personas acogidas en España.

Este apoyo se reparte en tres líneas de acción de la organización humanitaria. La primera de ellas se centra en promover la integración sociolaboral de las personas refugiadas y los solicitantes de protección internacional a través de planes personalizados. Estos planes incluyen la cobertura de necesidades básicas, el bienestar emocional, la asistencia jurídica, itinerarios de inserción laboral y el refuerzo escolar, entre otros ejes de trabajo.

En segundo lugar, la partida va destinada a facilitar traslados sociosanitarios -en vehículos medicalizados, ambulancias, transportes adaptados o avión- de personas con circunstancias de extrema vulnerabilidad que vayan a ser acogidas en España.

Y, por último, la ayuda de la Fundación ”la Caixa” está apoyando la atención de Cruz Roja a los desplazados internos en la región suroeste de Ucrania y en la frontera con Rumanía -donde se está produciendo una gran concentración humana-, teniendo como centro la ciudad de Chernivtsi. Cruz Roja está atendiendo allí las necesidades más inmediatas de los desplazados.