Innovación y financiación, claves para afrontar la crisis alimentaria global

Con la idea de que es necesario cambiar la forma de luchar contra el hambre, nace 'Together Against Hunger' (Juntos contra el Hambre), un movimiento formado por expertos, activistas y otros actores de la sociedad civil que busca nuevas maneras de afrontar este desafío. El 16 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Alimentación.
HAZ14 octubre 2022
<p>Foto: Acción contra el Hambre. Guatemala. </p>

Foto: Acción contra el Hambre. Guatemala.

A pesar de todos los avances de las últimas décadas en la lucha contra la desnutrición infantil, 45 millones menores de cinco años en el mundo sufren desnutrición aguda, y las predicciones apuntan a que esta cifra continuará creciendo en los próximos años. En la actualidad, solo el 20% de los niños y niñas que sufren de desnutrición reciben tratamiento, según datos de la ONG Acción contra el Hambre.

Si atendemos al número de personas en el mundo que requieren asistencia alimentaria, sigue aumentando a un ritmo alarmante. En 2021 ya había 828 millones de personas que padecían hambre (casi el 10% de la población mundial), un incremento de alrededor de 46 millones desde 2020 y 150 millones desde el inicio de la pandemia de la covid-19, según el último informe de Naciones Unidas.

Estas tendencias son el resultado de múltiples factores que se retroalimentan entre sí, que van desde conflictos hasta crisis climáticas, económicas y sanitarias. Todos estos factores están impulsando el hambre hacia formas más complejas e interconectadas que afectan, especialmente, a tres grandes zonas del mundo: la región africana del Sahel, Oriente Medio y Latinoamérica, según apunta la ONG.

Para afrontar esta crisis alimentaria global, Naciones Unidas estima necesarios 41. 000 millones de euros destinados a ayuda humanitaria, de los que solo un 37’5% ha sido cubierto hasta ahora. Pero si tomamos como referencia la última década, podremos comprobar que la financiación humanitaria ha disminuido un 27% (informe The Hunger Funding Gap, publicado por Acción contra el Hambre).

Nuevas formas de luchar contra el hambre

Para esta ONG, asumir el desafío de acabar con el hambre requiere, además de financiación, de innovación. En el Día Mundial de la Alimentación, Acción contra el Hambre quiere poner el foco en la innovación como medio para reducir las cifras del hambre: por un lado, en la necesidad de realizar diagnósticos más sencillos -el diagnóstico es la entrada al tratamiento- y, por otro, en la mejora de los accesos a los tratamientos, empoderando a todos los agentes comunitarios.

“Hay que simplificar los protocolos de tratamiento, buscar alternativas a los productos nutricionales y seguir empoderando a los agentes comunitarios no sanitarios, algo que nos permita salir de los enfoques tradicionales”, apunta el director de i+D+I de Acción contra el Hambre, Amador Gómez. La app SAM Photo es un ejemplo de cómo la innovación puede ser un instrumento para paliar el hambre. Esta app, desarrollada por Acción contra el Hambre, que permite fotografiar a niños y niñas menores de cinco años en lugares remotos o afectados por conflictos, determina si padecen desnutrición aguda mediante fotodiagnóstico.

Poder transferir conocimiento y competencias a través de la formación para dar mayores capacidades a la población se erige como otro de los retos y necesidades en la lucha contra el hambre. “Como organización humanitaria, por ejemplo, tenemos el conocimiento para abrir pozos de agua en determinadas zonas” -apunta Amador Gómez, “pero lo realmente importante es tener la capacidad de transferir ese conocimiento y la competencia a las comunidades locales; en eso es en lo que estamos trabajando”, añade.

En los últimos 30 años, el mundo ha logrado enormes avances en la lucha para erradicar el hambre, pero es insuficiente. Hay que reinventar la forma de luchar contra esta lacra, según la ONG. Y para debatir y encontrar nuevas propuestas, Acción contra el Hambre ha impulsado Together Against Hunger (Juntos contra el Hambre), un movimiento que fomenta la solidaridad, formado por expertos, activistas, filántropos, donantes y legisladores comprometidos con la urgencia de tomar acciones clave para acabar con el hambre en el mundo. El primer encuentro ha tenido lugar en Washington los días 12 y 13 de octubre.

“En la lucha contra el hambre nada va a cambiar si no modificamos las formas de trabajar, atrevámonos a romper el perímetro y a explorar otros caminos”, concluye Gómez.

Comentarios