Oxfam Intermón ingresa 1,4 millones de euros por testamentos solidarios
Este año, 2022, será en el que más personas en nuestro país realizarán un testamento solidario contra la desigualdad, legando parte de su patrimonio o bienes a organizaciones como Oxfam Intermón para este fin, según apunta la ONG.
En el último año, más de 606 personas en toda España decidieron incluir en su testamento a Oxfam, lo que supone un 21% más que en 2021. La organización estima estima que solo la mitad de quienes realizan testamento solidario a su favor avisan con antelación.
Entre abril de 2020 y marzo de 2021, estas herencias supusieron para la organización 1.450.046 euros, que en España se destinaron entre otras cosas a apoyar a más de 170.000 personas distribuyendo alimentos y medicamentos y ayudando con el pago de facturas de vivienda, luz, entre otros.
“Una donación a través del testamento, se puede convertir en algo tan básico como agua potable, a la que todavía millones de personas en el mundo no tienen acceso; o en ayuda de primera necesidad para las víctimas de las emergencias y las crisis humanitarias del futuro, o en formación para que las personas más vulnerables tengan acceso a mejores oportunidades y puedan salir adelante”, explica Laura Kvaternik, responsable de Testamentos Solidarios de Oxfam Intermón.
“Es, en definitiva, dejar el futuro en buenas manos: las de aquellas personas que, con un poquito de ayuda que reciban, harán grandes cosas”, concluye Kvaternik.
Mujer, sexagenaria y sin hijos, un perfil en evolución
El testamento solidario es una forma de colaboración que cada vez se va conociendo más en nuestra sociedad. Actualmente el perfil más común de la persona que hace testamento solidario es el de una mujer, de entre 60 y 69 años, soltera, sin hijos, que tiene además una relación previa con la organización u organizaciones a las que decide donar parte de su herencia, como decisión coherente con este compromiso.
Sin embargo, este perfil está en evolución, influido además de por el mayor calado del testamento solidario, por un aumento en los testamentos en general como consecuencia de la pandemia: casi 15 % en 2021, la mayor evolución desde 2007, según datos del Centro de Información Estadística del Notariado. Cada vez es más común que las personas que hacen testamento a favor de causas sociales sean hombres y personas más jóvenes -a partir de 40 años aproximadamente-.
“Estamos encontrando casos de personas con hijos, que consideran parte de su educación este tipo de colaboración. No solo les legan la parte de la herencia que les corresponde por ley, sino también los valores con los que los han educado y que deciden expresar en su testamento de esta manera”, señalan desde la ONG.
¿Cómo hacer un testamento solidario?
Hacer un testamento solidario es un proceso sencillo. Según explica Oxfam, hay que acudir con el DNI a una notaría, y el notario únicamente necesitará tres datos de la organización a la que se desea nombrar beneficiaria: el nombre legal, el NIF y el domicilio.
En la mayoría de los casos hacer un testamento notarial no cuesta más de 50 euros. El testamento es, además, un documento modificable que la persona testadora puede cambiar en cualquier momento si lo desea o sus circunstancias cambian.
El testamento solidario no tiene por qué incluir todos los bienes de la persona. Lo más habitual es donar dinero en metálico -una cierta cantidad concreta o un porcentaje sobre un valor- pero también pueden donarse a este fin bienes muebles, inmuebles o valores financieros.
“Siempre digo que me jubilaré a los 70 años y viviré 120, tal y como avanza la tecnología”, comenta Ton Guardiet, empresario de 49 años, quien ha incluido a Oxfam Intermón en su testamento. “Me quedan muchas cosas por hacer, pero quería, si hay un imprevisto, dejar un legado con propósito, así que fui al notario y lo puse por escrito”.
“La muerte es una parte más de la vida. Instaría a todos a que nos preguntáramos: ¿qué te imaginas que se dirá en tu funeral? En mi caso, además de que se diga que soy un motivado de la vida y que me apasiona lo que hago, me gustaría que se dijera que soy una persona sensible, una buena persona, con propósito en la vida”.
Y anima a tomar esta decisión: “Invitaría a todo el mundo a que lo hiciera. Si en algún momento piensan de otro modo, lo pueden modificar, pero es muy satisfactorio pensar que, cuando tenga que ocurrir, vas a morir dejando un propósito”.